- El colectivo está formado por más de 9.000 profesionales que contribuyen a la innovación y la seguridad alimentaria en España.
- La profesión se proyecta hacia el futuro con presencia en ámbitos como la economía circular, las energías renovables o la gestión del agua.
Gijón, 17 de octubre de 2025. Bajo el lema “Ingeniería agronómica: la raíz del progreso”, el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos (CGCOIA) celebró el pasado 17 de octubre en Gijón el segundo acto conmemorativo del 75º aniversario de la creación de la organización colegial. La cita, que tuvo lugar en el complejo Bellavista, reunió a representantes de los Colegios Oficiales de toda España y a colegiados homenajeados por su trayectoria profesional.
El acto contó con la presencia del consejero de Movilidad, Medio Ambiente y Gestión de Emergencias del Principado de Asturias, Alejandro Calvo Rodríguez, ingeniero agrónomo, quien destacó la vigencia y la necesidad de la profesión en la actualidad.
Calvo recordó su participación en el primer acto conmemorativo del aniversario, celebrado el pasado mes de mayo en Madrid, y felicitó tanto al CGCOIA como a los colegiados homenajeados en Gijón. Además, subrayó que la ingeniería agronómica “está más viva que nunca” y que “su papel es clave en sectores que serán determinantes para el futuro, como la energía, el agua o la economía circular”.
75 años de compromiso con el progreso del país
Durante la apertura del acto, el presidente del CGCOIA, Baldomero Segura, realizó un recorrido por la creación de la organización colegial, impulsada por la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos junto con el Ministerio de Agricultura en los años cincuenta del siglo pasado, así como por la evolución de dicha organización hasta la actualidad.
Segura hizo un breve repaso de la historia del CGCOIA desde que el Ministerio de Agricultura publicara, el 31 de marzo de 1950, el decreto que dio carta de naturaleza a los Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos: “Durante estos 75 años, los colegios han ido adaptándose a los profundos cambios que ha experimentado la sociedad española en general y el sector agroalimentario en particular. Nuestra organización, en la medida de sus posibilidades, debe ser capaz de seguir aportando su colaboración para mantener la actividad de unos profesionales que han contribuido y contribuirán en el futuro al impulso de un sector agroalimentario eficiente y sostenible, manteniendo sus estándares de calidad y seguridad alimentaria”, recalcó.
Como ya había comentado el día anterior, durante la celebración de la XXII Junta General de Representantes en su informe, partiendo casi de la nada, sin ayudas ni subvenciones y con el esfuerzo de unos pocos, hemos sido capaces de consolidar una organización profesional que dispone de recursos y capacidad suficientes para atender a sus actuales 9.000 colegiados, aunque, sin duda, desearíamos poder servir a todos los que ejercen la profesión en la actualidad, resaltó el presidente del Consejo General.
Homenajeados por su trayectoria profesional
Según Baldomero Segura, esta consolidación de los colegios y de la organización profesional ha sido posible gracias a la implicación de numerosas personas: los miembros de las Juntas de Gobierno, que además de atender sus obligaciones profesionales dedicaron tiempo al gobierno del colegio; el personal de administración, que abre las sedes y atiende a los colegiados en su día a día; los secretarios técnicos, que han facilitado la labor de los colegiados y defendido las competencias de los ingenieros agrónomos cuando ha sido necesario; y, sobre todo, los colegiados, que con su buen hacer en la prestación de los servicios profesionales han consolidado la figura de los ingenieros agrónomos como profesionales que ofrecen soluciones técnicas, eficientes y económicamente viables a los problemas que se le plantean.
Sin ellos, sin todos ellos, no habría sido posible llegar a la situación en la que nos encontramos hoy, destacó Segura. Sin ellos, no habríamos podido superar las dificultades vividas en épocas de crisis, ya fuera por falta de trabajo o por cambios normativos que pusieron en riesgo la supervivencia de los propios colegios, añadió.
Acto seguido, los decanos de los colegios oficiales de ingenieros agrónomos tomaron la palabra para hacer un recorrido por la historia de cada uno de sus colegios y, a continuación, entregaron los diplomas e insignias a los colegiados homenajeados durante el acto:
- COIA de Albacete: D. Pedro Gutiérrez Pulido y Dª. Llanos Alfaro Ponte
- COIA de Andalucía: D. Manuel Pimentel Siles, D. Andrés del Campo García y la Tertulia Columela.
- COIA de Aragón, Navarra y País Vasco: D. Antonio J. Felipe Mansergas, D. Carlos Almagro Gutiérrez y Dª. Emilia Puig Amorós.
- COIA de Asturias: D. Félix Sánchez de Posada, D. Víctor Tresguerres González y D. José E. Sáenz Fernández.
- COIA de Castilla y León y Cantabria: D. Luis Carlos Moro González, D. Fernando Franco Jubete y D. Vicente Castellanos Alonso.
- COIA de Cataluña: D. Joan Guim Balcells.
- COIA de Dentro y Canarias: Dª. María Victoria Muñoz Roncero, D. Pedro Jesús Santolaya Heredero y D. Alberto Mayordomo Mayordomo.
- COIA de Extremadura: D. Marcelino Díaz González.
- COIA de La Rioja: D. Fernando Martínez de Toda Fernández y D. Miguel Ángel de Gregorio Sánchez.
- COIA de Levante: D. Jaime Veyrat García.
- COIA de la Región de Murcia: D. Francisco Artés Calero, D. Antonio Navarro Quercop y D. Andrés A. Martínez Bastida.
Tras la entrega de las distinciones se celebró un aperitivo y un almuerzo de todos los presentes.
Enlace a fotografías del 2º Acto de conmemoración:
https://drive.google.com/drive/folders/1kxVf_2vlVyhuJ82yExEcR_JdbQMcVVxi